Antecedentes
La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad entró en vigor en mayo de 2008. En el Artículo 9 sobre la Accesibilidad establece que: "a fin de que las personas con discapacidad puedan vivir en forma independiente y participar plenamente en todos los aspectos de la vida, los Estados Partes adoptarán medidas pertinentes para asegurar el acceso de las personas con discapacidad, en igualdad de condiciones con las demás, al entorno físico, el transporte, la información y las comunicaciones, incluidos los sistemas y las tecnologías de la información y las comunicaciones, y a otros servicios e instalaciones abiertos al público o de uso público, tanto en zonas urbanas como rurales". El Artículo 19 sobre la vida independiente en la comunidad establece que los Estados Partes reconocen el derecho en igualdad de condiciones de todas las personas con discapacidad a vivir en la comunidad, con opciones iguales a las de las demás, y adoptarán medidas efectivas y pertinentes para facilitar el pleno goce de este derecho por las personas con discapacidad y su plena inclusión y participación en la comunidad. El Artículo 27 sobre el Trabajo y Empleo también establece: "los Estados Partes reconocen el derecho de las personas con discapacidad a trabajar, en igualdad de condiciones con las demás; ello incluye el derecho a tener la oportunidad de ganarse la vida mediante un trabajo libremente elegido o aceptado en un mercado y un entorno laborales que sean abiertos, inclusivos y accesibles a las personas con discapacidad".
El Informe Mundial sobre la Discapacidad, emitido por el Banco Mundial y la Organización Mundial de la Salud en 2011, identifica "menos participación económica" como una de las áreas que afecta las vidas de las personas de discapacidades. Informó que "Un estudio reciente de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) mostró que en 27 países las personas con discapacidades en edad laboral experimentaron importantes desventajas en el mercado laboral y los resultados del mercado de trabajo eran peores que las personas sin discapacidad en edad laboral. La estrategia de Incheon para "Hacer que el derecho sea real" para las personas con discapacidad en Asia y el Pacífico, para la Nueva Década de las Personas con Discapacidad en Asia y el Pacífico, 2013-2022, incluye la meta de reducir pobreza e impulsar la labor y perspectivas del empleo.
En consideración a los marcos de políticas internacionales arriba mencionados, JICA tiene la intención de promover la participación y medios de vida de las personas con discapacidad en sus comunidades en todo el mundo. En base a la Convención, así como el Informe Mundial y otros marcos, el Centro Internacional de Okinawa (OIC) de JICA ha puesto en marcha este programa de capacitación con el objetivo de promover la participación social y medios de vida de las personas con discapacidad utilizando recursos locales y sistema de redes entre los gobiernos nacionales y locales, organizaciones no gubernamentales, empresas privadas y las organizaciones de personas con discapacidad en Japón